El yen en una encrucijada: Normalización del BoJ y riesgos del carry trade
El yen japonés se encuentra en una encrucijada. Tras años desempeñando un doble papel, activo refugio y moneda de financiación para operaciones de carry trade, se enfrenta a un punto de inflexión. El Banco de Japón insinúa el fin de su era de tipos ultrabajos, ¿recuperará el yen su brillo como activo refugio o seguirá siendo la moneda de financiación favorita del mundo?
Caminos divergentes de los bancos centrales
Uno de los grandes impulsores de los recientes movimientos del yen es la divergencia en los tipos de interés. En los últimos años, la Reserva Federal de EE. UU. y otros bancos centrales subieron agresivamente los tipos desde casi cero, mientras que el Banco de Japón se mantuvo ultra-dovish. Esta enorme brecha de tipos hizo que endeudarse en yenes fuera extremadamente barato y mantener dólares más rentable, alimentando las “operaciones de carry trade”. Los inversores tomaban préstamos en yenes de bajo costo para comprar dólares de mayor rendimiento. ¿El resultado? El yen se debilitó: a finales de 2023 estaba alrededor de ¥150 por dólar.
USD/JPY sigue la brecha de rendimiento entre EE. UU. y Japón (2019-2025)

Fuente: TradingView. Todos los índices son de rentabilidad total en dólares estadounidenses. El rendimiento pasado no es un indicador fiable del rendimiento futuro. Datos a 9 de septiembre de 2025.
Como muestra el gráfico, el USD/JPY subió cuando la brecha de rendimiento EE. UU.-Japón se amplió en 2022, pero comenzó a revertirse cuando el BoJ insinuó un endurecimiento y los rendimientos en EE. UU. alcanzaron su punto máximo entre 2023 y 2025.
Ahora Japón finalmente tiene algo de inflación, y el Banco de Japón empieza a insinuar un cambio de política. Incluso un leve indicio de endurecimiento ha sacudido al yen: a finales de 2023, el mero rumor de poner fin a los tipos negativos provocó un salto del 2% frente al dólar. La marea está cambiando a medida que la Fed hace una pausa y Japón avanza hacia la normalización.
Estatus de refugio: perdido y recuperado
El yen ha sido visto durante mucho tiempo como un activo refugio: una moneda en la que los inversores confían durante tormentas globales. Las inversiones japonesas en el extranjero pueden repatriarse en una crisis. Y años de rendimientos cercanos a cero llevaron a muchos a ponerse cortos en yenes; cuando esas operaciones se deshacen, la prisa por comprar yenes suele impulsarlo al alza.
Sin embargo, el halo de refugio del yen se ha desvanecido. Durante la guerra de Ucrania en 2022, el yen cayó en lugar de fortalecerse. El aumento de los precios del petróleo (Japón importa la mayor parte de su petróleo) amplió el déficit comercial y perjudicó al yen. Mientras tanto, los altos tipos de interés en EE. UU. hicieron que el dólar resultara más atractivo que el yen, incluso en plena crisis.
A medida que la brecha de tipos entre EE. UU. y Japón comienza a cerrarse, el yen podría recuperar gradualmente su papel de refugio. Los operadores ya se están posicionando para un yen más fuerte: las apuestas especulativas favorecen cada vez más su apreciación. Si el BoJ realiza incluso modestas subidas de tipos, reforzaría aún más el atractivo del yen como refugio.
Riesgos del carry trade y efectos dominó
Si el Banco de Japón se detiene en el proceso de endurecimiento, el yen podría seguir débil y las operaciones de carry trade prolongarse. En cambio, una subida sorpresa de tipos del BoJ o un choque global podrían hacer que el yen se disparara al deshacerse abruptamente estas operaciones. Es como un muelle comprimido: años de apuestas unidireccionales podrían revertirse de repente, sorprendiendo a muchos.
Un yen en alza presionaría a los exportadores japoneses y podría provocar una mayor volatilidad, ya que los inversores huirían de los activos de riesgo. Otros refugios como el oro y los bonos del Tesoro estadounidense han superado recientemente al yen, pero eso podría cambiar si suben los tipos japoneses. Y si se deshacen las inversiones en mercados emergentes financiadas en yenes, esos mercados también sentirán la presión. La trayectoria del yen tiene consecuencias globales.
Conclusión final: por qué el yen importa ahora
El yen está entrando en una nueva era. Ya no es una apuesta unidireccional para obtener beneficios del carry trade, y su estatus de refugio podría fortalecerse a medida que Japón normalice su política. Para los inversores, un yen repentinamente más fuerte puede alterar las carteras globales: las posiciones en el extranjero sin cobertura podrían enfrentar pérdidas cambiarias, pero mantener algo de yenes o activos denominados en yenes podría proporcionar un colchón. La historia del yen está evolucionando, y estar atento a los cambios de política del BoJ y a los movimientos del yen es clave para navegar los mercados globales en el futuro.